Cap. 5: Decepciones y nuevas amistades

         Luego de haber tenido una cita maravillosa con Peter, y de ser interrumpida por mi Hermano, me fui a mi cuarto. Me di cuenta de que me había quedado con su chaqueta. Luego me quite todo ese maquillaje, me cambie y cepille mis dientes. A los minutos caí en un sueño profundo.

         ¿Qué eres estúpida? Te dije que vinieras al bosque, pero sola. Que despistada…

         Esta vez distinguí mas la voz de la chica, por el tono parecía ser joven, y solo pude ver unos ojos cafés.

         -¿De nuevo? – dije al pararme sobresaltada. Entonces mi mama entro a mi habitación.

         -¡¿Qué ha pasado?! – dijo al entrar a mi cuarto.

         -Nada, solo a sido una pesadilla, siento despertarte – dije volviéndome a acostar – al menos mi temperatura es normal – dije en un susurro. Volví a dormir.

         Estaba en el bosque con Peter, en la cascada él se apareció de la nada. Me dijo que me amaba, se fue acercando poco a poco hasta que me beso, luego de ello mis labios se congelaron literalmente, después el hielo se fue desplazando hasta congelarme por completo – ahora era hielo – una lagrima cayo por mi mejilla.

         Solo fue un mal sueño, me dije, pero fue tan vivido. Sentí un escalofrió recorrer mi espalda, no le di importancia. Gracias a dios hoy entrabamos a las 10, así que me arregle con calma guarde todos mis libros en el bolso y me percate de que aun tenia 40 min para desayunar. Termine y al salir me encontré con un chico de hermosos ojos azules recostado con su deportivo azul.

         -¡Buenos días! – dije con una gran sonrisa en mi cara.

         -¿Lista para irnos? – dijo Peter.

         -Si, pero antes ten tu chaqueta – le dije dándole su chaqueta en las manos.

         -Gracias – a continuación abrió la puerta del copiloto e hizo un gesto con la mano invitándome a sentarme. Luego él se sentó y piso el acelerador. Estaba descapotado por lo que sentía toda la brisa en mi cara. Llegamos al instituto.

         Mis amigas por un lado me veían…. Decepcionadas, sabia que si salía con Peter eso significaba que no seriamos amigas. Ángel por el contrario al verme dejo caer sus cosas, creo que le sorprendió mucho. Entonces Peter me abrió la puerta sacándome de mis pensamientos.

         -Gracias – logre decir, entonces empecé a caminar. Sentí mas miradas de los P y los A sobre mí.

         -No le des importancia – me susurro al oído mientras me tomaba de la mano (sentí una corriente), yo la apreté de los nervios.

         Pasamos como si nada hasta llegar al salón de clases, éramos los únicos que estaban en el salón. Entonces deje mis cosas en el puesto de Peter – estaba recostada de una mesa y él estaba enfrente.

         -Oye, anoche…- empezó a decir Peter.

         -Si mi Hermano es un pesado – dije – lo siento… ¿decías? – me vio como por medio minuto a los ojos. Se acercó un poco  mas a mi,  tomo mi cintura con sus manos, yo me pare de puntillas para verlo mejor, nuestros labios estaban a solo segundos entonces el acabo esa distancia y me beso en los labios, fue un lento y pausado beso, yo lo tome del cuello para acercarlo mas a mi.

         -Siento interrumpir – dijo alguien logrando que Peter y yo nos separáramos.

         -Que raro tu de inoportuno – Dijo Peter hacia Ángel.

         -Necesito hablar con Rebecca – dijo Ángel, omitiendo el comentario de Peter – a solas.

         -Esta bien – dije antes de que Peter respondiera, el me miro como ¿Estas segura? – Eh si vamos – dije tomando mi bolso.

         -Cuídate – dijo Peter dándome un último y cortó beso en los labios.

         -¿Cómo puedes besarlo? – dijo Ángel con repugnancia al salir del salón.

         -¿De que querías hablar?

         -De Peter…

         -Hay de verdad es muy temprano para que empieces con lo de los clanes…

         -No es eso… el solo te utiliza, te esta enamorando para que seas una de su clan, espera – dijo impidiendo que dijera algo – si no me crees velo por ti misma – dijo mostrándome el perfil de Peter en Facebook, aparecía como de novio de una tal Nat Acosta. Iba a decir algo cuando – aguarda, ve el ultimo estado de Nat – decía “cuanto extraño a mi Peter, ya quiero volver y comerlo a besos” - este fue publicado ayer.

         -Ósea que el…

         -Lo siento de veras, pensé que deberías saberlo – dijo, me iba a abrazar pero decidí, salir de ese lugar. Me fui por la puerta trasera hacia el bosque, había llegado al prado, ahí me desplome en el suelo y pegue mi cabeza a mis rodillas.

         ¿Cómo? Pensé. Como alguien que fue tan lindo y tan dulce podría ser… así, una lagrima cayo. El Encerio me gustaba – 2 lagrimas cayeron - yo no era de las que se enamoraban del primero que pasaba, y tampoco estaba loca por el, pero pensé que quizás…. Crush, escuche una rama romperse.

         -¿Quién anda ahí? – dije poniéndome de pie. Crush otra rama - ¿Quien eres? – entonces salió una sombra frente a mi, era de pelo oscuro, tenia ojos café claro algo rayados, hermosos. Cargaba una camisa negra de botones, con unos jeans y unas converse, su cabello perfectamente despeinado lo volvía algo sexi.

         -Lo siento – dijo dando un paso hacia mi, yo retrocedí – disculpa de veras, soy Andrés  – dijo dedicándome una sonrisa – pasaba por acá y te vi. No deberías estar sola en un bosque ¿sabes?

         -Lo se, soy Rebecca.

         -No quiero ser entrometido pero sea cual sea la razón de tus lagrimas no creo que se las merezca – dijo acercándose lentamente hasta quitarme las lagrimas de las mejillas - ¿me quieres contar la razón? – pregunto dudoso. Había algo en el que me calmaba, sus palabras eran cálidas por decirlo así, me tranquilizaban.

         -Es por un chico…

         -Ya sabia yo que no merecía tus lagrimas – me interrumpió – Lo siento – sonrió, me contagio su sonrisa.

         -Salimos, nos besamos y descubrí que tenia novia – dije volviéndome a sentar en la grama, Andrés  me siguió.

         -Estoy seguro de que esa chica no es ni lo mitad de linda que tu – comento.

         -No lo se, ni siquiera vi su foto.

         -Oye ¿si estudias en el eclipse school, no deberías estar en clases? – dijo viendo mi uniforme.

         -Es que necesitaba…

         -Tiempo a solas, lo entiendo pero no debes de hacer como si fuese el fin del mundo, demuéstrale a ese chico que no  te importa. Claro, no te digo que te le metas a otro, pero sigue adelante – dijo parándose junto a mí – ahora, vuelve a clases – me extendió la mano y yo la agarre para pararme.

         -Gracias Andrés  – dije antes de irme. Le iba a decir algo más pero al voltearme ya no estaba.

         Llegue a la hora del almuerzo, al entrar a la cafetería varias miradas se posaron sobre mi. Peter me sonreía, lo mire y me fui a sentar en donde estaban las chicas, vi de reojo que su sonrisa se había apagado.

         -¿Estas bien? – Me pregunto Ángel, yo asentí  - toma – dijo dándome un almuerzo – no permitiré que te vuelvas a desmayar.

         -No es necesario, yo comprare algo – dije.

         -Claro que es necesario, ahora come – yo le sonreí y empecé a comer.

         -Y ¿Qué tal tu cita anoche? – dijo Marilyn. Al hacerlo todos la comieron con la mirada – ¡ah mi no me vean así! ¡Ni que tuviera monos en la cara! – dijo torciendo los ojos, a veces era muy infantil, pero también adorable.

         -Bien – me limite a contestar – y ¿Bella sigue enferma?

         -Si, mañana vendrá a clases.

         -Ahs, que horror tener que soportar a esa pesada – dijo Roxy.

         -¡Roxana! – dijo Ángel.

         -A mi no me digas nada, yo no tengo porque fingir que me agrada, a nadie en esta mesa le cae bien ni siquiera a Beca ¿o si? – me miro desafiante.

         -Pues… no la conozco lo suficiente, pero voy con Roxy – ella sonrió plácidamente y siguió con su almuerzo.

         -Igual, sabes que es mi novia – dijo Ángel.

         -Lamentándolo mucho – dijo Roxana – además sabes que ella solo sale contigo porque eres el líder… es un zorra.

         -¡Bueno ya! ¿Podría terminar de comer? – dijo Fabianna como si fuese su mama. Ambos se vieron y le sacaron la lengua a Fabi, esta los miro desafiante y ambos bajaron la cabeza.

         El resto del día paso volando mis amigas se encargaron de que no me tropezara ni por error con Peter, y al Salir me fui rapidísimo con las chicas. Entonces me dieron ganas de ir al prado para pensar un rato, el instituto debería estar abierto digo tenían practicas hasta las 6. Me cambie rápidamente, llevaba algo simple, ya que no tenia ganas para arreglarme mucho, acomode un poco mi cabello y fui hasta el instituto.

         Me dejaron entrar sin ningún problema. Entre al bosque y gracias a dios ya conocía el camino perfectamente, llegue al prado y me tire boca arriba a ver las nubes pasar, el sol brillaba intensamente. Entonces saque mi bloc y mis lápices del bolso y empecé a pintar ese hermoso prado de nuevo. Ya casi iba a terminar cuando mi concentración fue interrumpida.

         -Eres buena  - dijo alguien detrás mio yo del espanto pegue un grito.

         -Ah, eres tu – dije al ver a Andrés  – no vuelvas a asustarme así – dije mientras me paraba para despeinarlo.

         -Jajaja te asustas muy rápido Jajaja – como le causaba tanta gracia lo empuje e hice que se cayera.

         -Jajaja ahora si me rió – en eso el movió su pie y lo enredo con mi pierna logrando que me cayera junto a él, los 2 reímos y reímos - ¿Qué haces acá? – logre decir después de tantas risas.

         -Yo te iba a preguntar lo mismo – dijo alzando las cejas – pues mi casa en esta dirección, y al verte me dio curiosidad, por cierto eres buena dibujante.

         -Gracias – entonces me miro fijamente – bueno yo vine a despejar mi mente, y este es mi lugar favorito desde que llegue.

         -Si, pero ¿Qué tus jefes no te han prohibido estar acá sola?

         -¿Jefes?... hablas de…. Ahí no ¿tu también? – dije sentándome y poniendo mala cara.

         -¿Yo que? – dijo sentándose junto a mi.

         -Pues que también eres uno de esos bebes de que si clan A que si clan P que si tienes que elegir que si uno que para este viernes…- torcí los ojos.

         -No yo solo preguntaba, porque como vas al eclipse school…

         -¿Ósea que hay otras escuelas? – sonríe con la idea.

         -No, es que pensé que ya habías elegido.

         -¿Entonces tu no eres de ningún clan?

         -¡Andrés ! ¡Andrés ! – gritaba una voz femenina su voz era dulce y tierna, un poquito chillona pero mas que todo dulce – ahí estas, llevo buscándote… ¿y esta? – dijo viéndome de arriba abajo. Ella tenía el pelo oscuro como Andrés , sus ojos eran hermosos, grandes y de un color gris verdoso, éramos de la misma estatura, sus labios eran rosa.

         -Violeta ella es Rebecca… una amiga – aclaro a esa chica de hermosos ojos, de seguro su novia pensé. Andrés  y yo nos paramos.

         -Un placer – le dije sonriendo, ella ignoro mi comentario y se dirigió a Andrés .

         -Te e buscado toda la tarde – dijo – sabes que detesto dármelas de detective – dijo cruzándose de brazos.

         -Hay ya mi Vilu hermosa no te pongas así – dijo antes de empezar a hacerle cariñitos y demás, le empezó a hacer cosquillas, dejando ver la hermosa sonrisa que tenia la tal Violeta. Entonces mis manos se convirtieron en 2 puños, se había olvidado por completo de mi presencia, eso me hacia sentir excluida, y esa chica de seguro lo trataba de la patada pero el se lo aguantaba por lo linda que era…. Un minuto ¿tenia celos de Andrés ? Pero si lo acababa de conocer. Además ¿no me gustaba Peter? O bueno esos sentimientos se perdieron cuando descubrí que tenía novia.

         -Ya déjame – dijo Violeta de nuevo con su dulce y seductora voz. Entonces ambos dejaron su pelea y se pararon.

         -Bueno adiós Rebe – dijo dándome un beso en la mejilla antes de volver con Violeta.

         -Oye linda ¿si conoces el camino de vuelta? – Pregunto Violeta. Entonces me percate de que ya eran las 6:30, las escuela estaría cerrada ¿por donde saldría?