viernes, 27 de julio de 2012

Cap. 1: Nuevo vecindario


Mi vida era solo un relato de la típica adolecente de 16 años que cumplía con todas sus tareas, que no cometía errores, que nunca le había cuestionado algo a sus padres…y eso no  me gustaba  porque sentía que aunque quisiera, siempre había algo que me hacia hacer todo lo que querían que hiciera y no lo que yo pensaba.

        Sentada encima de mi cama revisaba mi perfil en Facebook, y para mi sorpresa no tenía  ninguna nueva solicitud, ni notificación, ni mensajes. A mi no se me daba muy bien hacer amigos era algo tímida.
        En mi cuarto todavía, metía mis pertenencias en una caja que decía “cosas de Rebecca”,  había 5 cajas más que decían lo mismo. Mi familia se estaba mudando, dado a que mi padre había encontrado un mejor empleo. No me molestaba en lo absoluto, me parecía genial cambiar de ambiente, pero a mi mellizo Javier le parecía una ridiculez.
         -¿Todo listo? –me pregunto mi madre, tenia aspecto de des madrugada.
        -Si…todo listo para nuestro castigo – dijo Javier mientras enviaba un mensaje por su móvil.
        -Javier ya lo hablamos, esto es lo mejor para todos – dijo mi padre en lo que encendía el auto – deberías ser más como tu Hermana – ambos odiábamos que dijeran eso.
   En el viaje ninguno musito palabra, lo único que se pudo oír fue la música proveniente de los audífonos conectados al Phone de Javier. Al llegar a la urbanización mi mama había sacado una hoja toda arrugada en donde se podía ver una dirección. Mi papa seguía las indicaciones de su esposa hasta llegar a una casa, con un muy lindo jardín.
-¡Bienvenidos a nuestro nuevo hogar! – dijo mi  madre mientras abrazaba a su esposo.
 -Más bien bienvenidos a tortulandia – protesto Javier, en lo que sacaba su equipaje y entraba a la casa de color celeste.
Al entrar a la casa pude ver varios hombres de la mudanza levantando y bajando cosas por doquier, hasta que mi Mama les dijo en dónde poner todo. Empecé a subir las escaleras de cerámica hasta llegar a un pasillo en donde pudo  ver 4 puertas, 2 de ellas abiertas así que supuse que Javier debería estar en una de las 2 puertas abiertas. Decidí entrar a la del fondo –se encontraba totalmente abierta-.
Al entrar no vi absolutamente nada más que unas cajas, una ventana con vista al frente y un candelabro colgando del techo, y justo en ese momento sentí que me agarraban del estómago y grite del susto, tanto fue el pánico que hasta salte.
-¡Jajaja! – se reía Javier al ver lo mucho que me asusto
-Eres un idiota – dije mientras cruzaba lo brazos encima de mi pecho.
-Como digas, y ¿Cuál va a ser tu habitación?, la mía ya la elegí es la más grande – dijo con una enorme sonrisa en el rostro – bueno la segunda más grande la primera ya tiene las cosas de mis papas – dijo con una mueca.
 -Eh, no se tal vez esta – dije mientras volví a ver la habitación. A continuación fui hasta la puerta - ¿Qué hay ahí? – dije en lo que miraba unas escaleras desplegables en la esquina del pasillo.
-No lo sé ¡entremos! – Dijo con una sonrisa traviesa en el rostro  - claro a menos que te de miedo.
-No, claro que no – dije tragando saliva.
-Bueno a ver que hay – dijo mi Hermano en lo que subía las escaleras.
  Con los pelos de puntas seguí a Javi en esos 5 escalones. Apenas pusimos un pie en el piso de aquella habitación se podía ver lo espacioso que era, pero dado a la poca luz solo se veía casi al final del lado derecho de la habitación una ventana con cortinas moradas muy oscuras. A continuación aquella ventana se abrió como una pequeña puerta, gracias al viento. Fue tan fuerte que hasta la puerta se cerró. Javi y yo nos sobresaltamos.
  -Bueno – dijo mi Madre algo exhausta. Mientras oprimía el interruptor de la luz. Dejando ver la habitación de una adolescente, una enorme cama matrimonial al final del cuarto con un gran edredón rosa y blanco, justo en medio de 2 closets color blanco, en el lado izquierdo se encontraba un escritorio blanco también (parecía un juego completo), algo más a la izquierda y en frente de la cama se encontraban 2 pufs color rojo, en frente de una enorme pantalla de plasma, y si caminabas unos pasos a la izquierda desde la puerta podías ver otra puerta la cual parecía ser un baño –espero que te guste – comento antes de sentarse en la ventana – tu padre y yo tardamos mucho decorándolo para ti – dijo mirándome.
  -¿Para mí? –  pregunte perpleja todavía en la puerta.
  -¿Para ella? – Dijo de inmediato Javier señalándome con el pulgar de su mano izquierda – no es justo.
-Si para ti, cuando saques más de 16 también te compensaremos – dijo mientras se encaminaba a la puerta – ahora vámonos, tu Hermana se va a instalar.
Apenas se fueron empecé a curiosear un poco. Me fije que las paredes del cuarto eran blancas y tenían varios círculos de colores como: rosa, azul, lila, amarillo y verde manzana. De todos los tamaños y la verdad se veía muy bien. Al adentrarme un poco más a mi nueva habitación vi que la pantalla de plasma tenía un mueble marrón  claro, en donde se ubicaba un DVD con unas cuantas películas.
Ya eran las 9:00 pm y acababa de terminar de ordenar todo, así que fui al hermoso baño y tome una ducha como de 15 min. Luego de ponerme mi pijama y cepillarme los dientes fui hasta mi cama y me acosté a dormir, mañana seria un día importante.
“¿Qué esperas? Te necesito poco a poco me estoy  muriendo, ellos necesitan de ti mas que tu de ellos no los olvides…”
Repetía una y otra vez una voz femenina durante toda la noche me pare sobresaltada y toda sudada gracias a eso. Ya con mi uniforme y mis rulos color negro me encontraba en el auto de mis padres esperando que Javier llegara para irnos, como vi que no aparecía salí a ver la razón de su tardanza, cuando se me cayo el bolso dejando que todas mis cosas se cayeran.
  -Creo que debes tener más cuidado – dijo un chico de ojos como dorados, su cabello era castaño claro. Me dedico una amplia sonrisa mientras me ayudaba con mis cosas.
  -Gracias – dije tomando mis cosas, mientras le dedicaba una sonrisa. Al pararnos pude ver que me llevaba tan solo unos centímetros - ¿tu también vas al eclipse school? –dije al ver que llevaba puesto el uniforme, el cual no le quedaba nada mal.
-Si, y por tu uniforme me imagino que también estudias allá – dijo aquel lindo chico de ojos dorados – soy Ángel –dijo extendiendo su mano.
  -Beca – dije y al tocar la suya sentí como una corriente desde mi mano hasta mi espalda – bueno me tengo que ir fue un gusto conocerte – le dije al ver que Javier iba al auto.
-¿Quién es ese? – dijo viendo a Ángel.
-Un chico ahí, que acabo de conocer – dije y al ver que no le importaba se subió al auto y yo le seguí.
Al llegar al instituto vi que era grandísimo había 3 edificios uno al lado del otro, cada uno de 3 pisos y eran algo angostos. El primero era de color blanco y decía primaria en un cartel justo en la entrada. El del medio era verde claro y tenía el mismo letrero pero este decía Bachillerato I etapa. El último era marrón y decía bachillerato II etapa.
-Supongo que este es el nuestro – dije al señalar el edificio marrón.
  -Yo igual vamos – dijo entrando a ese sector. Al llegar al estacionamiento vi muchos carros de marca, pero 2 en especiales me llamaron la atención era deportivos parecían el mismo modelo pero uno azul marino y el otro rojo.
-¡Beca! – gritaron a lo lejos, parecía venir del grupo del auto rojo, todos se apartaron permitiendo ver que era Ángel quien me llamaba.
  -¡Hola! – dije caminando hasta el pude notar que varios me miraban- ¿Cómo has estado? – le pregunte, como si no hubiera mas gente.
         -Bien ¿y tu? – dijo Ángel sin mucho animo.
         -Bien, bueno te dejo tengo que ir por lo horarios, adiós – dije mientras movía mi mano y me iba sin decir nada.
         -¡Hola!, soy Peter – dijo un chico alto de  pelo negro azabache, con la piel algo bronceada, y unos ojos azules tan bellos como el océano – si quieren los ayudo.
         -Ah, gracias yo soy Javier y ella es mi Hermana Rebecca.
         -Solo dime Beca – dije sonriendo.
         -Bueno ¿Qué necesitan? - dijo Peter, dejando a ver sus dientes blancos.
         -Es que no conseguimos la oficina del director – dije – es que nos dijeron que la secretaria nos daría los horarios de clases.
         -Bueno yo los puedo llevar, incluso les puedo dar un recorrido.
         -En realidad yo pensaba que Rebequita, podía ir a buscar los horarios en lo que yo averiguaba lo de los equipos de futbol ¿verdad? – comento Javi. Cada vez que decía “Rebequita”, significaba o que necesitaba un favor.
         -Ahs…esta bien, pero me debes una  - le dije muy seria.
         -Adiós – dijo dándome un beso en la mejilla y saliendo a correr.
         -Entonces ¿quieres un recorrido? – dijo Peter todavía hay.
         -¡Hola Peter!, veo que conoces a mi amiga Rebecca – dijo Ángel poniéndose a mi lado – y de ¿Qué hablan?
         -Es que Peter me va a dar un recorrido por el colegio.
         -Que generoso de tu parte pero no es necesario, yo se lo voy a dar.
         Justo en ese momento sonó la campana.
         -Gracias a ambos pero ya deben ir a clases – dije con una mueca.
         -Amenos dinos ¿en que año estas? – dijo Peter.
         -En 4 – respondí casi dudando de mi respuesta.
         -Genial, nosotros también, ven nuestra primera clases es en Ingles. Si quieres te sientas con migo así te familiarizas con el colegio – dijo Peter.
         -Peter tenemos que hablar un minuto. Rebecca adelántate sigue a esos chicos – dijo señalando a las mismas personas que estaban en el auto rojo y mas adelante las del carro azul.
         -Ok –dije asintiendo con la cabeza y siguiéndolos, hasta ir a su mismo paso.
  La escuela se veía mil veces más grande por dentro, había 8 salones por piso todos bien cuidados y espaciosos todos de blanco, los casilleros eran también espaciosos los del lado derecho rojos y los del lado izquierdo azules.
         -¡Hola! – Dijo una chica de pelo castaño claro con ojos marones claros, y muchas pecas en ambas mejillas, tenia en el pelo un cintillo azul eléctrico y muchos de sus mechones lizos estaban fuera de lugar – yo soy Roxana, pero dime Roxy – dijo guiñando el ojo y dejando ver una amplia sonrisa – y ellas son mis amigas Marilyn, Fabianna y María.
         -Hola, yo soy Rebecca – dijo mientras subía los escalones.
         -Un placer, y por lo visto eres de 4 ¿no? – dijo la que parecía ser Fabianna. Tenía unos mini zarcillos de diamantes y unas pulseras de alambres muy elegantes era un poco más gordita que sus amigas, y tenia el pelo negro como el de Rebecca, solo que más grueso, y lo acomodaba en una elegante y perfecta coleta de medio lado.
         -Si, ¿y ustedes también son de 4? – pregunte terminando de subir los escalones.
         -¡Si! ¿No esta genial? – dijo Marilyn. Ella era mas baja que Rebecca pero solo un par de centímetro, su pelo era algo más oscuro que el de Roxy y mucho más liso y largo. Ella tenía tan solo un ganchito en su cabello larguísimo. Sus zarcillos tenían plumas, muy lindos y glamorosos.
         -Bueno ya, déjenla respirar – dijo María. Ella era la mas alta, tenia el pelo algo grueso y negro azabache su piel era del mismo color que el chocolate con leche (mas chocolate que leche), sus ojos oscuros eran preciosos y sin duda, ese marcador que tenia colgando de su camisa había sido el causante de que aquellas 4 chicas tuvieran un corazón en la palma de la mano – te recomiendo sentarte en el lado izquierdo.
-Ok… - dije algo extrañada.
         Había 2 columnas  cada una de 16 puestos. Se veía que eran 4 columnas pero las unieron en 2. Al frente del salón se encontraba un televisor y un DVD. Había recordado lo que me habían dicho las chicas, así que decidí sentarme en el lado izquierdo. No sabía si adelante o atrás así que decidí en el medio, el cual parecía ser el mejor puesto. Al sentarme allí algunas personas me vieron de reojo. Todos pasaban y ninguno o ninguna se sentaban conmigo, pensé que olía mal pero la verdad olía a fresas y vainilla, luego pensé que quizás porque era nueva pero  Javier estaba al final del mismo lado con unos chicos hablando de futbol.
         A continuación Ángel y Peter entraron al salón, Ángel se sentó a mi lado como si ese puesto tuviera su nombre, ni siquiera dijo hola, o ¿me puedo sentar? No simplemente puso su bolso allí y tomo asiento.
         -Rebecca, aquí tienes tu horario y el de tu Hermano –dijo Ángel entregándome unos papeles arrugados.
         -Pero…pensé que…- dije muy confusa.
         -Yo y Peter somos delegados, así que no hay problema – dijo sin prestar mucha atención – ¡ah!, y otra cosa, este es mi puesto así que no te sientes aquí sin que yo te invite – al principio pensé que era una broma, pero luego vi que Ángel hablaba muy enserió.
         -Lo siento, es solo que no sabia que tenía que pedir una cita para sentarme en un puesto – dije muy malhumorada. Recogí mis cosas, pues ni en mi antigua escuela me  habían tratado así.
         -Espera ¿Qué haces? – Dijo Ángel muy extrañado – y no tienes que pedir cita solo permiso – dijo con una sonrisa irónica.
         -Eres increíble – muy rápido me dirigí al lado derecho.
         -Beca, siéntate aquí si quieres – dijo Peter señalando una silla vacía justo a su lado. Peter se ubicaba en la misma línea que Ángel así que nos veía directamente sin dificultad alguna.
         -Gracias – dije sentándome y acomodando mis cosas.
         -¡Good morning, class! – dijo una Sra. Con una coleta alta. Tenía ojos grandes y preciosos, su pelo negro no se veía muy largo. Su estatura baja, y contextura algo gordita.
         -¡Good morning teacher! – respondió toda la clases.
         -Bueno hoy vamos a traducir. Traje algunas películas. Vamos a ver las mejores partes de las películas, en ingles y ustedes lo van a traducir en español – dijo haciendo una pausa – quien me haga algo que no es ni se moleste en entregármelo. Primero van a poner el titulo de la película. Luego colocaran el texto traducido, dado a que ya hemos visto todo lo necesario para traducir perfectamente espero que todos saquen mas de 18; y por cada película pondrán el titulo. Tienen que hacer mucho silencio para escuchar bien – dijo parándose de su escritorio para poner la película – primero veremos un pedazo de Titanic, luego veremos, Avatar, después me darán sus cuadernos con las traducciones. Y la otra semana haremos lo mismo – dijo dándole clic al botón del DVD.
         La película del Titanic, siempre había hecho que votara un par de lágrimas. Pusieron la parte en la que el barco se estaba hundiendo y las mujeres y niños bajaban en botes, claro solo la alta clases. Los demás se hundían así fueran niños o mujeres. Faltaba todavía 40 min de película desde esa parte y nada mas al empezar a ver como las niñas se despedían de sus papas, y le decían que ¿Por qué no se iban con ellas?, se me aguaban los ojos. Pero estaba más concentrada en lo que decían, para así traducirlo, aunque no era muy necesario ya que me había visto esa película más de mil veces.
         La profesora prendió la luz y saco la película del DVD y la metió en su estuche.
         -¿Has entendido? – me pregunto Peter.
         -Si, estuvo algo difícil en algunas partes, pero en otras súper sencillas – dije.
         Se me había hecho sencillo el ingles desde 1 año. Incluso mi padre decía que si la habían confundido de país.
         A continuación la profesora le dio play a la película de Avatar. Empezó ya casi por la mitad, sentí un cosquilleo en el hombro, y al ver que era observe una mano tocándome.
         -Hola – dijo una chica con flequillo cuadrado y 2 coletas algo infantiles pero coquetas, las sostenía con una cinta Roja. Su cabello rubio y enrulado le daba un tono pálido a su piel. Tenia una nariz perfilada y unos labios finos y con mucho brillo – perdón pero será que puedes moverte un poco no me dejas ver – dijo casi en un susurro, su tono era muy dulce tanto que hasta daba miedo. Al terminar la oración le dio una amplia sonrisa al inclinar la cabeza.
         -Si, lo siento – dije acomodándome y al volver a ver a la chica, la vi acurrucada en un chico de pelo oscuro. Parecía Hermano de Peter, ya que su cara era muy parecida, solo que este era más musculoso y tenia el pelo más largo y sus mejillas tenían pecas, sin eso era prácticamente un clon.
         -Por cierto soy Amber y él es mi novio Daniel – dijo aquella chica. Su novio Daniel movió la mano en vista de que su novia lo había presentado.
         -Un placer yo soy…
         -Rebecca, lo sabemos – dijo Daniel interrumpiéndome.
         Ya había finalizado la película y la única parte que me faltaba era en la que había estado hablando con aquella pareja. Todos se estaban parando a entregar la hoja e irse a disfrutar de la hora del almuerzo. Era sorprendente como todos aquí se esperaban a entregar, había como un orden primero entregaron Peter y Ángel luego las personas que se encontraban delante y atrás de ellos, y así fueron saliendo. Yo salí justo después de Peter, algunos me vieron de reojo, justo en la puerta la estaba esperando Ángel recostado de la pared.
         -Hola te estaba esperando…mira sé que quizás fui algo grosero en clases pero solo quería que supieras, como son las cosas acá – dijo mientras se acomodaba su melena castaña.
         -Como digas, ¿sabes en donde esta la cafetería? – dije impaciente por comer algo.
         -Si, solo sígueme – dijo Ángel mientras bajaba las escaleras, y se dirigía a la derecha en donde al fondo se podía ver una enorme puerta blanca con manillas plateada - si quieres te sientas con nosotros – dijo señalando una mesa dorada en donde también se encontraba          Javier – no sigues molesta ¿verdad? – dijo al ver que no respondía.
         -Quizás…- dije caminando a la mesa.
         -Hola – le dijo María mientras se dibujaba un corazón Verde en su mano.
         -Y dime Rebecca…- empezó a decir Roxana.
         -Solo Beca – comente para quitar las formalidades.
         -Ok, Beca… ¿Qué opinas de robarles los novios a los demás? – dijo mientras abrazaba a un chico de pelo oscuro y con un lunar en el pelo encima de su oreja derecha.
         -¡Roxana! – le dijeron aquellas chicas con las que me había topado hace rato.
         -¿Qué?...yo solo estoy asegurándome de no tener una arpía entre nosotras…responde – dijo volviendo a mi y sonriéndome de manera espeluznante.
         -Pues…yo…creo que no esta bien – respondí al final.
         -Ok, solo no te acerques a mi novio y estarás viva –  me amenazo antes de volver a su comida.
         -Yo soy Julián el novio de Roxy – dijo con una amplia sonrisa.
         -Al que no me debo acercar – dije para corroborar.
         -Exactamente, me encanta cuando la gente entiende lo que yo digo – dijo Roxana besando a su novio en la mejilla.
         -Y ¿tienes novio? – pregunto Ángel.
         -Eso a ti no te interesa amor – dijo una chica de rizos rubios y largos, con unos ojos color verde igual que los míos - soy Bella la novia de Ángel.
         -Un gusto – dije algo desanimada.
         -Yo solo preguntaba – dijo Ángel en su defensa.
         -Hola, Rebecca – dijo Peter parado junto a la mesa – me preguntaba si me podrías ayudar con ingles, es que no entiendo mucho y tu eres excelente – dijo mirándola solo a ella.
         -Que raro Peter, porque tienes un promedio de 16 en ingles y últimamente no sacas menos de 17 – comento Ángel.
         -Si pero las ultimas clases no  las entiendo y sinceramente lo de traducir no se me esta dando.
         -Ok, te parce ¿mañana por la tarde? – dije sin tomar en cuenta la opinión de Ángel.
         -Excelente – dijo antes de irse a otra mesa del otro lado.
         La cafetería tenia 2 lados uno con mesas rojas y otro con mesas Azules, y medio de cada lado había una mesa dorada – en una estaba Ángel y en la otra Peter – las mesas doradas tenían la mejor ubicación. Al final en donde había menos luz, y se encontraba un montón de basura había como 20 mesas blancas.
         Después de almorzar al entrar a Matemática me sentó con Peter en el mismo sitio que en Ingles. Ya eran las 4:00 de la tarde y solo querría irme a mi casa y descansar un poco. La campana acababa de sonar, y al salir me fui junto con Javier al estacionamiento, observe que parecíamos  ser los únicos que faltaban de su salón por llegar.
         -¿Que crees que este pasando? – me pregunto Javier.
         -No lo se pero ya vámonos – dije caminando mas rápido al auto.
         -¿Ya se van? – pregunto Ángel obstruyendo el paso.
         -Si…bueno en realidad Bequita…-otra vez el tono- tendrás que irte sola porque tengo practica o más bien la prueba para entrar, y si mis papas saben – respondió a una pregunta que no se había formulado aun.
         -Este…- dije pensando - ¡bien!, dame las llaves – dije extendiendo la mano al frente.
         -Bueno, pensé que podías tomar un autobús, o ir a pie estas algo gorda – dijo haciendo una mueca.
         -¡Claro que no! – Dije frunciendo el ceño – y ni siquiera me se la dirección de la casa.
         -Aquí tienes – dijo dándole un papel arrugado, el mismo que tenia mama ayer en el carro.
         -Si quieres yo te llevo – dijo Ángel volviendo a la conversación – digo por las practicas hoy no tengo entrenamiento – dijo señalando a Javier.
         -Perfecto todos ganamos – dijo Javier antes de irse.
         -Es increíble – dije volteándome a Ángel - y ¿a tu novia no le molesta?
         -Pues no creo, y de todas formas ya me voy y vives al lado de mi casa – tomo una pausa - ¿vamos?
         -Genial – dije rindiéndome. Seguí caminando detrás de él, sorprendentemente cuando se acercó a su coche todos se quitaron era como si le tuviesen miedo.
         Ya estaba en la puerta del copiloto.
         -Disculpa, pero yo voy acá – dijo Bella empujándome a un lado – puedes sentarte atrás, pero rápido no quiero llegar tarde.
         -¡Bella! – dijo Ángel mirándola con cara de desacuerdo.
         -¿Qué?, hoy voy a mis clases de arte…soy pintora – dijo hacia mi
         -O bueno eso cree ella – dijo Ángel riéndose de su propia broma, y al instante su Novia le pego en el hombro. A continuación Ángel prendió su hermoso deportivo rojo.
         -Yo también soy dibujante o pintora como tú le quieras decir – dije para integrarme un poco.
         -Que bien – dijo Bella muy desanimada y cruzando los brazos – ¡ya acelera! – dijo en lo que salíamos del colegio.
         -Ok – dijo con una gran sonrisa. En ese momento el carro iba súper rápido,  sentía cada cuerva más fuerte y aunque al principio  dio un montón de miedo, al rato lo disfrute y me encanto.
         -Adiós bebe – le dijo Ángel a Bella.
         -Pensé que me dejarías de ultima – dijo Bella reprochándole a Ángel.
         -Pero dijiste que ibas tarde – dijo Ángel aclarando.
         -Ahs, hablamos luego – dijo tirando la puerta y mirándome como si le hubiese hecho algo terrible.
         -Si quieres te pasas – dijo señalando el puesto que antes ocupaba Bella.
         -Ok - dije tomando mi bolso y cambiándome de puesto – por lo visto no le gusto mucho que me llevaras.
         -No es tu culpa, ella es algo…protectora – dijo Ángel volviendo a conducir.
         -Mmm…es lógico y ¿Cuánto lleva viendo clases de arte? – dije con muy poco interés.
         -Desde hace poco, esta buscando algo que le guste – tomo una pausa – ya intento con ser porrista, y es la líder pero no le interesa. Luego probo con todos los deportes, voleibol, futbol, básquetbol, jockey, natación – dijo numerando los deportes, con los dedos de las manos – y ahora esta probando con su lado artístico – dijo volteando los ojos.
         -Y ¿Qué te gusta a ti? – dije mientras entrabamos a la urbanización.
         -El futbol – dijo dejando a ver sus hermosos dientes blancos – toco la guitarra y hace 6 años que no me salgo de las líneas cuando pinto– concluyo. Ambos reímos.
         -Gracias por traerme – dije bajando del carro y despidiéndome con la mano.
         -No hay de que, y ¿a ti que te gusta? – dijo bajándose del carro y tomando sus cosas.
         -Toco el piano, soy una gran pintora – reímos a la vez – y bailo de todo.
         -Genial, yo tengo 2 pies izquierdos – dijo sonriendo.
         -Todo el mundo puede bailar solo ahí que conseguir la forma de encontrar el ritmo en sus venas – afirme.
         -Bueno adiós – dijo Ángel ya desde su puerta.
         -Adiós…
         Fui directo a mi cuarto, al llegar tome un lienzo y lo puse sobre mi caballete nuevo – claro primero me quite el uniforme – tome mis pinceles y pinturas y empecé a realizar trazos suaves. Al final de 2 horas tenia un hermoso prado que no tenia ni idea en donde lo había visto, era encantador tenia cualquier cantidad de flores y tenia suficiente espacio como para jugar un partido de futbol. Lo tome con sumo cuidado y lo coloque sobre mi escritorio.
         Como cosa  rara mi papa no llego a cenar, tuvo que ir a una reunión. No me extraño como siempre lo espere yo sola hasta las 12:00 de la noche cuando por fin llego, me dijo que porque estaba despierta, aunque no entiendo porque lo sigue preguntando desde que tengo 7 e esperado a mi papa para que así tenga quien le diga buenas noches. Luego de eso me fui a dormir.
“¿Qué esperas? Te necesito poco a poco me estoy  muriendo, ellos necesitan de ti mas que tu de ellos no lo olvides… por favor apúrate te necesito solo escucha mi voz…”
De nuevo esa voz femenina me despertó pero ahora no estaba sudada sino muerta del frio me tuve que poner 2 cubrecamas encima y una pijama súper abrigada para sentirme tibia.

2 comentarios:

  1. Me sigue cautivando tu historia...

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  2. me encanta esta historia mi personaje favorito es angel

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