-No me importa
– le dije – mañana se ira conmigo le guste a quien le guste.
-Beca,
entiende, en la cabaña no caben – me dijo Clavel.
-Bien,
entonces viviré con ella aca.
-No ahí
suficientes habitaciones – dijo Alexander.
-¿Por qué no
quieren que este con ella?
-No es eso –
dijo Clavel.
-Entonces no
veo el problema a que vivamos juntas – Clavel le dedico una mirada a Alexander
haciéndole entender que yo tenia razón, el suspiro.
-De acuerdo.
Vivirán aca. Les daremos una habitación para las dos. Podrán mudarse esta tarde
– dijo Alexander resignado.
-Gracias –
dije con una sonrisa triunfal saliendo.
Era Miercoles
en la mañana, había faltado a mis clases de la mañana para solucionar lo de
Flor, asi que hoy nos mudaríamos a una habitación del corazón del bosque. Sin
duda extrañaría vivir con Andres y Violeta, pero Flor era mi hermana y no me
separaría de ella, no de nuevo. Fui a la habitación de Flor y le encanto la
noticia. Luego termine mis clases de la tarde y le avise a Violeta y Andres,
les entristeció la idea pero lo entendieron y se ofrecieron a ayudarme a
mudarme.
-¡Hey! ¡ese CD
es mio! – me dijo Andres tomando un disco de David Guetta.
-No se como termino en mis cosas –
menti con mirada inocente.
-Aja – dijo el
mirándome serio.
-¿Ya tienes
todo? – dijo Angel tras sacar otra caja.
-Si – dijo y
entre todos llevamos mis cosas al corazón del bosque.
La habitación
era grande y muy espaciosa, estábamos a unos 125 metros del suelo, la vista de
una gran ventana daba con la entrada del gigantesco árbol, la ventana estaba
justo entre dos camas individuales con sabanas blancas. Del otro lado de cada
cama había un closet que daba una imagen mas tierna a la habitación, ya que
como todo aca, estaba hecho de hojas y ramas. El baño estaba en una esquina del
lado izquierdo de la habitación y en el otro extremo de la habitación había un
pequeño escritorio, y aun asi quedaba suficiente espacio como para jugar Wii.
Flor ya estaba allí mirando desde la gran ventana.
-¿Me ayudas? –
dije como pude por la fuerza que hacia al cargar tantas cajas.
-Wow, si que
tienes cosas – me dijo Flor y de inmediato me ayudo.
Al terminar de
desempacar cenamos en la habitación una pizza que gustosamente nos trajo Angel.
La habitación ya estaba llena de mis cosas, que ahora también eran de Flor. La
luz de la luna entraba por la ventana y me encantaba aquella vista. Al irse
Andres, Violeta y Angel les agradeci de nuevo y luego me di una ducha. Gracias
a dios tenían calentador. Luego me coloque la piyama y al salir vi al Flor
mirando el sobre dorado.
-¿Crees que
sea de Mama? – me pregunto sin llegar a verme.
-No lo se –
dije sentándome en la cama de la izquierda. Ella estaba en la derecha.
-Me gustaría
que fuese de ella – dijo mirándome.
-A mi también
– dije.
-Eso no es
verdad – me dijo y volvió a mirar el sobre y se recostó de una almohada – a ti
te da miedo saber porque se fue, porque nos alejo de ella… Y no, no entre a tu
mente. Pero estuve dentro de ella durante 16 años… asi que se puede decir que
te conozco mejor que nadie – dijo con una pequeña sonrisa.
-Bueno para
que decirte que no, si, si – dije encogiéndome de hombros.
-Ya mejor
vamos a dormir – dijo colocando la carta a un lado y ahí fue cuando me di
cuenta de que cargaba una de mis pijamas - ¿Te molesta? – pregunto respecto a
la pijama.
-Para nada,
todo lo mio es tuyo – le sonreí – Buenas noches – dije apagando las noches.
-Buenas noches
Beca – y al instante me quede dormida.
El sol
golpeaba mi rostro. Abri mis ojos y me encontré con una cama vacia y tendida a
mi lado. Mire mi teléfono y me di cuenta de que tenia unos minutos para que
fuesen las 7:00 tendria que correr si quería llegar… un momento, no estoy en la
cabaña, no tengo porque llegar antes, ya estoy en la escuela. Con una sonrisa
volvi a cerrar los ojos, pero mi teléfono empezó a sonar.
-¿Alo? – dije
soltando un bostezo sin siquiera ver quien llamaba.
-¿Cómo
amaneció mi princesa? – pregunto Angel al otro lado haciendo que sonriera.
-Muy bien
ahora que te escucho – dije y sentía como tontamente me sonrojaba.
-Me alegra, ve
por tu ventana – dijo e imediatamente voltee.
-¿Cómo
llegaste aca? – dije ayudándolo a entrar.
-Esto esta
lleno de ramas – dijo antes de besar mis labios - ¿y tu compañera de cuarto?
-Madrugo. Y yo
ya debo arreglarme para clases.
-¿Ya? – dijo
haciendo puchero.
-Sip – dije
tronando la p.
-Bien – dijo
tirándose en mi cama.
-¿Qué haces?
-Te espero
para desayunar – dijo con su sonrisa de niño.
-Bien – dije y
tome mis cosas.
Me bañe en 10
minutos, me coloque unos jeans negros algo pegados, una camisa mas alargada a
los lados de color rojo con una clave de sol en medio de color negro, mis
converse, mi collar, mi cabello mojado lo deje suelto, algo de base y una línea
negra en el ojo mordí mis labios para que enrojecieran un poco y Sali, Angel
seguía acostado en mi cama.
-Estas
hermosa… quizás demasiado – dijo haciendo una mueca – si, definitivamente
demasiado. Ve a cambiarte – dijo señalando el baño. Yo me acerque y lo bese.
-Te amo.
-Yo también te
amo – dijo besando mi nariz – ahora a desayunar – dijo parándose y tomando mi
mano.
-Espera y tomo
mis libros – dije y luego de sacar los que me tocaban hoy busque mi bolso – oye
¿has visto mi bolso?
-¿Cuál de
todos? – pregunto con un poco de risa.
-El negro de
un solo hombro – dije mirando debajo de mi cama.
-No, solo
busca otro.
-Sera – dije y
tome el primero que consegui – aunque tendre que ver como consigo un lápiz,
colores y borra – dije guindándome el bolso en un hombro.
-Ten – dijo
Angel buscando en su bolso y sacando una cartuchera.
-¿No lo
necesitaras?
-Sera fácil
conseguir uno – dijo con una sonrisa, y sabia a lo que se refería. Era el
“jefe”
-Bien – dije
cerrando el bolso con la cartuchera de Angel dentro – ahora si vamos a
desayunar – tome su mano y juntos fuimos a la cafetería en donde estaba Flor
con uno de mis vestidos floreados, le quedaba muy bonito esos colores pasteles,
tenia unas zapatillas negras a juego con mi bolso, ahora sabia en donde estaba.
Y había trenzado su cabello dejándolo caer sobre su hombro derecho.
-Hola – dijo
Flor animada.
-Hola...- dije
sentándome – no tengo problema en que tomes mi bolso, pero podrías decirme para
sacar mis cosas antes – dije señalando el bolso.
-Oh, es que
crei que no utilizarías nada de esto – dijo señalando mi bolso.
-¿Pensaste que
no necesitaría mis lápices y cuadernos que uso diariamente? – dije alzando una
ceja y ella puso ambas manos en el aire en señal de que “que se yo” suspire –
olvidalo, solo avísame.
Luego fuimos a
clases y asignaron a Flor a grados mas bajo, Alex dice que es solo para que se
informe un poco, que ira desde el primer año y cada semana subirá uno hasta
llegar al mio, el 5to año. Asi que solo 5 semanitas y Flor estudiaría conmigo.
(Narra Flor)
Mi mañana
había estado maravillosa, algo agitada pero genial. Todos eran gentiles conmigo
e intentaban integrarme en cada conversación, me hacia sentir bienvenida, y yo
que temia que me creyeran un bicho raro. Al salir del almuerzo me sentía
hambrienta, aunque bueno desde que desperté solo pensaba en comer, supongo que
luego de estar 16 años alimentándome como una planta lo explica. Los pasillos
estaban lleno de guardianes y flores del bosque, me abrumaba tanta gente y aun
no manejaba muy bien mis piernas asi que debes en cuando sentía que me caería.
Mis hombros estanban adoloridos de tantos tropezones que me estaba dando toda
esta gente ¿Por qué no están en el comedor ya? Entonces otro empujon, pero este
fue muy fuerte y termine con el trasero en el suelo y un humor negro. De tener
a mi atacante en frente le hubiese gritado un par de cositas pero ya no estaba,
asi que no me toco mas que pararme y acariciarme el trasero por el golpe.
-¿Estas bien?
– dijo una voz un tanto familiar, aunque para mi todo lo era gracias a Beca.
-Ehm si – dije
sin ver quien era mientras limpiaba el vestido que cargaba.
-¿Tu eres Flor
no es asi? – entonces alce la vista y me encontré con Peter.
-Si y tu eres
Peter – afirme algo a la defensiva.
-Exactamente…
¿Cómo lo sabes?
-¿Cómo no
saber de ti? – dije con una sonrisa alegre, la cual de inmediato le contagie –
si estuve en la mente de Beca es obvio que te vi – dije ahora seria y odiosa.
-Ah es por eso
– dijo y yo gire los ojos.
-Si, es por
eso. Ahora si me disculpas, tengo hambre asi que Adios – dije llevándome dos
dedos a la frente y hechandolos luego al aire en señal de despedida y caminando
al comedor.
-Espera ¿No
quieres un recorrido? – dijo seductor.
-Si – dije
sonriendo y el hizo de nuevo lo mismo – pero no tuyo – cambie de nuevo la
expresión a seria.
-¿Segura? ¿Te
puedes arrepentir?
-Como puede
que no – dije y en eso el timbre sono – uff ¡Por tu culpa no pude almorzar! –
dije ahora mas que molesta.
-¿Qué tal si
te llevo a almorzar? – dijo sonriendo.
-Peter,
desaparece – dije y corri a mi próxima clase.
El dia se hizo
muy pesado, mi estomago rugia y eso me puso de mal humor. Al terminar todas las
clases corri a la cafetería y pedi una pasta, una sopa, un buen trozo de pastel
de chocolate y un inmenso vaso con jugo de Melon.
-Veo que
tienes hambre – dijo Beca sentándose a mi lado – te busque en el almuerzo.
-Peter me
distrajo y ya luego sono el timbre. No almorcé – dije mientras atacaba la
pasta.
-Hey, recuerda
respirar – dijo Beca – no vayas a ahogarte – yo sonreí agradecida de su
atención y preocupación – y ¿Cómo que Peter te distrajo?
-Si me cai el
me ayudo a levantarme y… olvidalo, no paso nada – dije mientras pasaba a la
pasta.
-No se
realmente donde te entra toda esa comida, la pasta es mas grande que tu – dijo
señalando el plato yo solo pude sonreírle – y ok, pero alejate de el.
-Que ¿te
pondría celosa? – le dije en broma.
-No seas
asquerosa – dijo golpeando levemente mi hombro – pero no quiero que este contigo.
-Si, pero no
me des en los hombros, hoy todo el mundo me tropezó y me duelen.
(Narra
Violeta)
-Por favor
¿por mi? – dije haciendo puchero.
-No Violeta.
Hablamos de los secretos de mi clan, no puedo – dijo Javier.
Estábamos en
su habitación, ambos acostados en su cama.
-Pero es que
este trabajo vale casi toda la nota de Historia del bosque… El profesor dijo
que debíamos hablar con ustedes, que ya había guardado los libros del clan P
bajo llave y que debíamos convencerlos. Por favor – dije antes de besar
cortamente sus labios.
-Deja y hablo
con Peter…- yo gire los ojos – Violeta tu deberías entenderme, me has estudiado
por años…
-A ti no, al
clan P – aclare, suspire – ya bueno pidele permiso, pero no ahora – dije y me
acerque a besar sus labios.
Prense suavemente
los mios contra los suyos y abri lentamente los labios haciendo que Javier introduciera
su lengua en mi boca, el tomo mi cintura y me coloco debajo del, sin llegar a apoyar
su peso contra el mio, mis manos estaban en su pecho sin saber muy bien que hacer.
Javier empezó a acariciar el final de espalda y luego la coloco a un costado empezando
a acariciar mi cadera y parte de mi estomago con su pulgar. Nuestros labios se separaron
pero Javier bajo a mi cuello haciéndome sentir un cosquilleo inexplicable, ya habíamos
tenido besos subidos de tono, y no era la primera vez que besaba mi cuello, pero
sentía que esta vez era distinto. Bajo poco a poco de mi cuello a mi hombro bajando
un poco mi camisa, luego su mano subió por mi estomago llegando al comienzo de mi
seno y con solo un roce de su mano y mi seno lo empuje alejándolo de mi.
-Y-yo Lo siento
– balbuceo Javier – fui demasiado rápido – dijo rascándose la cabeza.
Yo iba a decir
algo pero mi garganta no hablaba mi teléfono sono y conteste sin siquiera ver.
-¿Alo?
-Violeta es tarde
– me dijo Andres – aca en 5 minutos – dijo y colgó.
-Era Andres – dije
colocándome los zapatos y evitando su mirada.
-Ehm, claro yo
te llevo – tomo las llaves, yo mis cosas y en silencio salimos.
Estabamos en el
auto, no sabia que decir realmente… Beca me había hablado antes de Javier, el había
tenido inmensidad de novias, novias que parecían a veces modelos, yo no era modelo
y tampoco me sentía capaz de dar ese paso. Me gustaba como me hacia sentir, como
nuestras lenguas jugaban, como me daba cada caricia y los escalofríos que sentía
con cada una pero no me creía lista para llegar allí. Finalmente rompi el silencio.
-Javier yo… lo
siento.
-No tienes nada
que sentir princesa – dijo tomando mi mano y besándola – puedo esperar todo lo que
quieras, fue mi culpa, yo lleve las cosas a eso… - dijo con una sonrisa sincera
– no te sientas mal – dijo acariciando mi mano – te amo y no me importa esperar,
se que valdra la espera.
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Lo se, quitando lo de Violeta y Javier este capitulo entra entre los peores que he hecho, de verdad no hace falta que lo digan, es largo pero aburrido y lo siento, lo publique casi que por obligacion porque no queria dejar otra semana sin actualizar... Rommy de verdad muchas gracias por ayudarme con mi bloqueo pero como vez creo que igual no lo desarrolle muy bien.
La verdad, me lei cazadores de sombras, y mis dedos solo podian pasar las paginas de ese libro y no escribi en toda la semana, lo lamento.
Besooosss :*
No digas eso, a mi si me ha gustado, en todas las novelas hay partes en las que no pasan cosas muy importantes.
ResponderEliminarsigue asi, me encanta esta novela y la otra que tienes!!
podrías pasarte por mi blog, acabo de empezar y me gustaría saber tu opinión!
Gracias, un beso!
A mi tambien me ha gustado guapa!
ResponderEliminarSi, volvi,
voooooooooolviii:3333333
Y vaya mas me vale no volver a desaparecer! te leia desde ayer y hasta ahora termine, fueron bastantes capitulos sin leer y JO-O-DER
Y ese momento peter/flor, la verdad me encanto, insisto en que serian una linda pareja, seria una relación odio/Amor, esas de las que realmente me encantan. y eso me encanta
Vaya vayaa... que beca nos salio con caracter no? Y es que vale, que no te dejen ver a tu hermana luego de haberla sacado del corazon del bosque es inaceptable!
Jojojo$: Cosas entre Javier y Violeta calentandose no?
Esto promete ser muuuy interesante.
me encanto ese pequeño maraton,
espero leerte pronto!
besos!